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¿Qué es un laboratorio remoto?

Prácticas de laboratorio online con equipos reales

Un laboratorio remoto es una herramienta tecnológica, compuesta por software y hardware, que permite a docentes y estudiantes realizar, a través de internet, sus prácticas como si estuvieran en un laboratorio tradicional. Los usuarios utilizan y controlan los recursos disponibles en un laboratorio mediante el uso de sensores e instrumentación que permiten interactuar con equipos reales en vez de utilizar simulaciones y sin requerir la presencia física en el laboratorio.

Los laboratorios remotos, a diferencia de las simulaciones, nos dan acceso a equipamiento real. Los sensores nos transmiten la información recogida en cada instante de observación desde el lugar físico de experimentación hasta cada uno de los terminales conectados en cada momento. Los usuarios pueden, por tanto, familiarizarse con interfaces que se corresponden con equipos reales que manejan a distancia.

Una ventaja destacable de los laboratorios remotos es la ruptura de los límites espacio-temporales, al no requerir la presencia física del usuario en el laboratorio. De esta manera, los laboratorios están disponibles más allá del horario escolar o las prácticas presenciales programadas, lo que permite al alumnado incrementar el número de horas de práctica, requisito imprescindible para el aprendizaje en  las materias científico-tecnológicas.

Debido a su carácter práctico, los laboratorios remotos facilitan la incorporación de las metodologías activas, en especial el aprendizaje basado en la indagación mientras que fomentan la autonomía en el aprendizaje, al no requerir la concurrencia con el docente. 

Otro aspecto a destacar es la posibilidad de repetir una misma práctica o la realización de variaciones sobre la práctica inicial según las necesidades e intereses de los estudiantes, contribuyendo al aprendizaje personalizado y respetando las necesidades individuales de cada usuario.

No menos importante es la contribución de los laboratorios remotos al uso sostenible de los recursos. Un mismo laboratorio puede dar servicio durante veinticuatro horas al día a docentes y estudiantes ubicados en cualquier lugar del mundo, sin necesidad de reproducir las mismas instalaciones en cada entidad educativa.

La necesidad de enseñar a distancia derivada de la pandemia y la implementación masiva de sistemas de e-learning, incluso para enseñanzas presenciales, ha llevado consigo la implementación del uso de laboratorios remotos no sólo en cursos de ingeniería sino también en enseñanza reglada. Su expansión sólo acaba de iniciarse y en los próximos años veremos sus efectos en la educación.